El frío anda descalzo. Lo notamos al tacto de nuestros ipads, ipods, macbooks. Será difícil derribar el silencio creado por la muerte de este grande. Dejar atrás la memoria de lo conseguido por Steve Jobs. Las heridas del silencio y el fragmento del destino que le espera. Sabemos que su sombra todavía se va a quedar en este mundo buscando al que se ha ido. A su dueño. Repentina escapada de este adelantado a su tiempo. Hasta en su último idea en vida, su muerte, ha ido por delante. Bye a la persona que abrió la primera oficina de apple en un garaje. Think Different.