El cielo se despereza poco a poco. El agujero de la invisibilidad amanece. Te columpias por él y apareces en un lunes sin fin.
Pero no pasa nada.
Uno de esos lunes que parece colarse por un hueco y vuelve a empezar. Pesa unas 14 toneladas. ¿14? Quizás 14.000.
Pero no pasa nada.
Ese lunes que inventa las ganas de volver a empezar. De continuar con más fuerza que nunca. Traemos la maleta cargada de ideas. De nuevos proyectos. De ilusión. De versos. De cuadros. De viñetas. De anécdotas. De esa ilusión que nos empapa de optimismo. Que nos hace mirar hacia adelante. Y también hacia atrás. Ese lunes que vemos de nuevo por primera vez y hace que se haga el silencio y amanezca la reflexión.
Litros de luz. Ideas que se agolpan en tu cabeza. Que repiquetean para salir.
Si también tienes ganas de coger un poco de aire e inspirarte dale al play. Poesía de primeros auxilios.