Los libros nos hacen más libres. La cultura alarga sus brazos a quien la difunde. Emoción en llamas el ver como te desenvuelves en lo desconocido. En pura dialéctica de frontón y pelota. El lanzarse y buscar los límites más allá de las metas. El encontrar la razón de ser en el corazón.
El idioma es la pasión sostenida de la enseñanza. Es conocimiento. Es acercamiento. Es cantar al viento. Es conocer a esa parte desconocida de nosotros mismos. La lengua es el vehículo que te abrirá las puertas de la pasión. Por nuestra lengua, por nuestro país, por lo nuestro. Tus palabras te llevarán lejos, en concreto a esa patria llamada creatividad, ese no lugar donde las buenas ideas se hacen valiosas y sirven de algo.
Dónde te puedes comunicar, divertir, hacerte valer y sobre todo transmitir. Sapiencia que nos hace ver lo que otros no ven.
Twitter arde en tuits con el hastag #mundiala. Lleva recorridos unos 40.000 kilómetros tantos como la dimensión de la tierra. Es el día internacional del Euskera (una de las lenguas más antiguas del mundo) y la idea (de la agencia dimension) es tan sencilla como alentar a la comunidad a comunicarse o enviar un tuit en euskera con ese hastag a aquellas personas que lo practiquen en todo el mundo. La campaña va sumando los kilómetros recorridos por el euskera.
Hay ideas sencillas que sencillamente van más allá.