Tengo la garganta llena de palabras que no podemos escribir. Tinta que se siente. Tinta que alza su voz. Muy alto y claro contra ese miedo que sale a tú búsqueda. Que te encuentra cuando el día huye.
Las sombras se despiertan en la noche. Las sombras se esconden en lo más recondo de tu voz.
Esa voz que sale a pedir perdón por tu garganta a buscar el sol.
Esa luz que probablemente brilla ahora en tus ojos.
Dale voz, es la voz del cáncer.