Porque ahora más que nunca la publicidad ha dejado de ser purpurina y celofán. Porque la buena publicidad es la que no es publicidad. Y los mejores anuncios son los que no son anuncios. Ya no hay cantos de sirenas. Ya no. Ahora más que nunca las campañas tienen que aportar un valor, contar y hacer algo, ser útiles. Eficaces. Resolver problemas. Inventar soluciones. Impacto del fuego de artificio vs el impacto de esa buena idea a la que le salen manos que te agarran por dentro. Campañas que hacen que nos crezcan los ojos y los labios de admiración. Ocurrencias con las que se nos llenan las manos de rayos de luz.
Una compañía dental que crea la primera prótesis a un Leon malherido. La app que posibilita hacer backup para combatir el alzheimer. Regalar un coche off road para un pueblo que está aislado en invierno. Pagar la boda a una pareja en la que él se apellida Burger y su futura esposa King.
Algunos ejemplos de la nueva publicidad, la publiLidad.
Entradas
